La cubeta de las freidoras de agua-aceite se encuentra dividida en dos partes. El agua se coloca en la parte inferior, la cual servirá como filtro permanente.

El sistema que poseen ofrece un filtrado mucho más eficaz, ya que cuando los residuos se almacenan en el fondo, se acumulan en la parte del agua, lo cual hace que sea posible eliminarlos fácilmente sin necesidad de malgastar una sola gota de aceite.

Se pueden freír diferentes clases de alimentos usando el mismo aceite sin correr el riesgo de que los sabores se mezclen o que se genere un exceso de residuo que desprende la comida.

La limpieza de las freidoras de agua-aceite suele ser muy sencilla, dado que siempre que se cambia el agua se están eliminando los restos de alimentos, sin que sea preciso filtrar el aceite.

Otra gran ventaja frente a aquellas freidoras que cuentan con el elemento calefactor fijo, las cuales obligan a calentar por completo la cantidad de aceite que se tenga, sin importar la cantidad de los alimentos que se vaya a cocinar.